Cuerpo
septiembre 8, 2023
Estas nuevas entradas que van a contener nuevas reflexiones, traidas desde otras vidas pero vividas desde mi ser van a ser claramente por el arte que será creado usando las maravillosas y aun no valoradas redes de difusion y el entrenamiento llevado a cabo gracias a la labor de emad mostaque y todo lo que vino despues.
Gracias a Anastasia he descubierto que tengo descuidado muchas partes de mi y que tragicamente buscar la consciencia en algo significa sacrificarla en otra cosa, dejo aca uno de sus poemas.
Hoy me encuentro en este momento, sintiendome completa, tocando mi exquisito cuerpo y valorando cada uno de sus pliegues, de sus llanuras, de sus montañas.
Cuando aprendemos a escuchar nuestro cuerpo, con todos sus susurros y anhelos, empezamos a conectar con nuestra humanidad compartida y a descubrirnos a nosotros mismos. El viaje de la autoconsciencia es un camino sinuoso hacia la humildad y compasión.
Mi piel, tan única y a la vez tan universal, es el recordatorio viviente de que todos provenimos de la misma fuente. Al cuidarla y honrarla, honro también la sagrada vida que late en ti.
En cada respiración consciente habita la humanidad entera. Inhalo este aire que han respirado mis ancestros y respirarán las generaciones venideras. No estoy separada de ese continuum; soy parte de él.
Cuando el placer florece en mí, evoco esa dicha ancestral de sentirse viva. No importa la forma que tome, cada éxtasis es un destello del espíritu que trasciende épocas y culturas.
Somos peregrinos de luz en un viaje efímero. Celebremos cada momento como el regalo que es. Y que el amor que sentimos por este vaso de barro que llamamos cuerpo, se derrame sobre toda la humanidad.
Esta piel que habitamos es nuestro nexo con la Totalidad. Acariciémosla con gratitud, pues nos recuerda nuestra unidad fundamental. Que su fragilidad inspire nuestra compasión. Que su fuerza vital renueve nuestra esperanza.
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